Según un estudio realizado por Bancaja y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas –IVIE- en líneas generales la inserción laboral de los jóvenes ha mejorado desde 1996 a 2005. No obstante, la tasa de desempleo continúa siendo alta tanto en la Comunidad Valenciana (20,2%), como en Madrid y Barcelona (23,1%), y la temporalidad sigue siendo una constante en sus contratos. En este sentido solamente el 27% de los firmados por jóvenes entre 16 y 30 años en la Comunidad Valenciana tiene carácter de indefinido. Por otra parte, los servicios privados, el comercio y la hostelería se han convertido en los sectores que generan más contratos para los jóvenes de la Comunidad Valenciana, Madrid y Barcelona.
El estudio refleja el aumento en la importancia que los jóvenes conceden al trabajo. Quienes más importancia otorgan al trabajo son los jóvenes de Madrid y Barcelona, seguidos por los de Comunidad Valenciana. El empleo ocupa un lugar central en sus vidas, por eso muestran niveles muy elevados de implicación en el trabajo. La Comunidad Valenciana es la que registra los valores más altos (3,96 sobre 5).
El observatorio de la Inserción Laboral Bancaja-IVIE, además, profundiza en el análisis de la adecuación de los puestos de trabajo desempeñados por los jóvenes respecto a su nivel de estudios. A la pregunta ¿crees que el trabajo es adecuado a tu cualificación? un 36,7% de jóvenes de la Comunidad Valenciana consideraron estar sobrecualificados para su empleo, y los valores aumentan, llegando al 46,8%, en el caso de Madrid y Barcelona. Según el estudio, el desajuste entre formación y requerimientos del puesto de trabajo se debe, de un lado, al mayor nivel educativo de los jóvenes que se incorporan al mercado laboral, y de otro, a la inexistencia de una oferta capaz de absorber esa cantidad de personas con estudios.
A pesar de los inconvenientes que encuentran los jóvenes para insertarse en el mercado de trabajo su percepción sobre el mismo se mantiene estable respecto a los parámetros registrados en 1996. Los jóvenes de Madrid y Barcelona tienen una valoración algo más positiva sobre sus perspectivas laborales que los de la Comunidad Valenciana. Además, esta percepción ha empeorado respecto a 2002 mientras que en Madrid y Barcelona se ha mantenido relativamente constante. Sin embargo, afirman estar de acuerdo con las compensaciones que reciben. En este sentido, el 64% de los jóvenes de la Comunidad Valenciana perciben como razonable la relación entre su rendimiento en el puesto de trabajo y el salario recibido. Además, este salario se ajusta al que ellos habían esperado.
El trabajo también recoge los métodos de búsqueda de empleo más usados por los jóvenes y los más fructíferos. El recurso a amigos y familiares ha aumentado como principal herramienta de búsqueda de trabajo tanto en la Comunidad Valenciana como en Madrid y Barcelona. De hecho, su eficacia está probada pues es el método más efectivo. Por otra parte, la utilización del INEM como recurso para encontrar trabajo o el envío de cartas y currícula a empresas han descendido. No obstante, en cuanto a su eficacia, las autocandidaturas a las empresas son cada vez más productivas, especialmente en la Comunidad Valenciana. En 2005, el 55% de los jóvenes que citaron el envío de cartas y currícula como método de búsqueda de empleo encontraron trabajo por ese procedimiento.
Además, el estudio ahonda en los factores que benefician o dificultan la obtención de un empleo. La falta de experiencia se perfila como el mayor impedimento para conseguir un trabajo mientras que los contactos, la iniciativa propia y los estudios son factores que ayudan a encontrar un empleo. La iniciativa personal también cobra una gran importancia en el proceso de inserción laboral de los jóvenes, y según el estudio, ésta ha aumentado, respecto a años anteriores, fundamentalmente en la Comunidad Valenciana (3,97 sobre 5). También ha aumentado ligeramente la capacidad de innovar y realizar sugerencias de mejora en el trabajo tanto en la Comunidad Valenciana como en Madrid y Barcelona.
Según el informe la mayoría de los jóvenes que abandona su puesto de trabajo lo hace de forma voluntaria. En 2005 más del 65% de las separaciones de empleo tanto en la Comunidad Valenciana como en Madrid y Barcelona tuvieron este carácter. Entre los motivos que llevaron a los jóvenes a dejar sus puestos de trabajo destacan el de volver a estudiar (más del 70% en el caso de la Comunidad Valenciana, y más del 60% en Madrid y Barcelona) o el de haber encontrado otro trabajo. El nivel de estrés no suele ser un motivo para abandonar el empleo. De hecho, según el informe de Bancaja y el Ivie, los jóvenes experimentan reducidos niveles de estrés en el empleo. El estrés por sobrecarga de rol, que hace referencia al estrés causado por el exceso de trabajo, es el que más afecta a la población joven.
Este trabajo corresponde a los cuadernos 69 y 70 del Proyecto «Capital Humano» que Bancaja realiza junto con el IVIE. En él se analiza la evolución de la inserción laboral, y los valores, actitudes y experiencias en el empleo de los jóvenes entre 16 y 30 años en la Comunidad Valenciana, Madrid y Barcelona.